Castrosua Tempus Bienvenido al futuro

desarrollado y fabricado en España

Castrosua, tradicional carrocero y fabricante de autobuses de Galicia, apuesta fuerte por su modelo Tempus, un autobús totalmente híbrido, que combina magistralmente la tracción a través de dos motores eléctricos con una fuente más convencional para aumentar la autonomía. Primeramente fue un motor diésel Cummins de 103 kW, que produce energía eléctrico cuando sea necesario, la segunda versión opta por un motor Iveco de Gas Natural Comprimido, de 100 kW, y su tercera versión, presentado recientemente, opta por un motor PSI de autogas, que cuenta con 82 kW.

Para la tracción, los dos motores eléctricos de inducción, trabajando en paralelo, desarrollan 67 kW cada uno, con un total de 134, lo que da una buena potencia a este autobús también realizando trabajos más difíciles, como cuestas o con muchos pasajeros. El sistema de tracción es el ELFA 2 procedente del consorcio alemán Siemens.

Castrosua emplea tres baterías tipo Zebra, o sea de níquel y cloruro de sodio, denominadas también baterías de alta temperatura, ya que precisan unos 300 grados Celsius para su perfecto funcionamiento. Estas baterías desarrollan 19,8 kW/h y 620 voltios, lo que da un total de 59,4 kW/h de energía acumulada. De hecho, las baterías Zebra han dado un excelente resultado en muchas otras aplicaciones.

El Tempus de autogas, la última novedad, que Castrosua ha desarrollado junto con Repsol, ahorra un 40% de combustible y reduce drásticamente las emisiones de CO2 y de NOx. Con este sistema combinado, el vehículo obtiene una autonomía de 300 kilómetros; adicionalmente se puede enchufar directamente a la red eléctrica en cualquier parada prolongada.

El Tempus se suministra en varias versiones de autobús con dos o tres puertas. La empresa, fundada en 1948 y originaria de Santiago de Compostela, llevaba muchos años siendo la referencia en el carrozado y preparación de autobuses urbanos. Con el Tempus, la empresa opta por un modelo menos contaminante, ya que se considera que el futuro de las ciudades irá por adaptar el transporte público a vehículos menos o no-contaminantes para descontaminar las urbes.